Texto: Antonio Mainar Turon. Fotos: Antonio Soria
 

El pasado día 1 de Octubre se celebró la VI edición del FESTIVAL/EXHIBICIÓN de Aeromodelismo de Soria, en el nuevo Campo de Vuelo dotado de una pista de 120 X 20 m con riego asfáltico, que nuestro Club ha estrenado éste mismo año gracias a la colaboración de la Excma. Diputación Provincial de Soria, a solo 9 Km de Soria capital, en el término municipal de Velilla de la Sierra, cuyo Ayuntamiento a tenido a bien acogernos cediéndonos durante los próximos 10 años, una finca de casi 9 Ha absolutamente diáfana.

En los años anteriores se planteó el realizar una reunión de aeromodelistas para disfrute de los mismos. La presencia cada vez mayor de gente que venía a ver qué era aquello, nos hizo replantear la filosofía del evento: Como la diversión de los pilotos no está en absoluto reñida con la diversión del público, teníamos que intentar que lo nuestro no se quedara en una gran reunión de amigos. De ahí derivamos a realizar un FESTIVAL/ESPECTÁCULO que ha tenido su máxima expresión en la presente edición.
 

   B-17 dotado con 4 OS 25, propiedad de Guillermo de Benito, que gustó mucho en su tranquilo vuelo. Detrás puede verse el Sukhoi de 240cm de envergadura del amigo Jose Jiménez de Logroño.
 

Muchos de los Clubes participantes que acudieron desde La Rioja, Burgos, Miranda De Ebro Madrid, Zaragoza, Pamplona y Santander, nos han felicitado por la organización y la impresionante participación de público que logramos congregar, por ello nos gustaría poner por escrito cómo hemos logrado poner en marcha un evento de estas características.

ALGUNAS CIFRAS DEL FESTIVAL

La participación fue de 56 pilotos todos federados, de los que solamente 5 fueron de nuestro Club por motivos organizativos. El público asistente superó las mil personas, cifra que, para una ciudad cuya población ronda los 30.000, es muy importante.

El número de vuelos fué de 98 para lo cual se hizo necesario volar varios aviones a la vez (en ocasiones se llegaron a juntar seis aparatos volando).

Carmelo Lamperez de Miranda de Ebro en el momento de ejecutar magistralmente su tabla de acrobacia, con una tranquilidad admirable.

Pudimos contemplar las exhibiciones de cuatro excelentes pilotos participantes en la copa Breitling a los que se permitió volar en solitario por las características especiales de su exhibición. A destacar la extraordinaria tabla de acrobacia que realizó Carmelo Lamperez de Miranda de Ebro y que fue narrada y descrita puntualmente por la megafonía para deleite de los presentes. Cinco pilotos participaron en una emocionante y divertida "caza del zorro", cuya cola fue cortada tras múltiples intentos por un único piloto (Daniel Garces, del Club Aeromodelismo Soria).

Un momento de la "caza del zorro". Observese el viento reinante en la manga.

Valentin Garcia de Burgos hizo diversas pasadas por detrás del público (fue el único piloto autorizado a traspasar la linea de pilotos) tirando caramelos o paracaidistas desde su "Cigueño". Tuvimos la suerte de ver muy de cerca un avión Turbina modelo Kangaroo, portador de turbina RAM 750, que supuso la guinda del Festival a cargo de Carlos Ibañez procedente de Zaragoza, impresionándonos a pilotos y público con el vuelo y sonido tan realista de su avión.

El avión turbina Kangaroo con Carlos Ibáñez de Zaragoza dirigiéndose a cabecera de pista. Una unidad móvil de TV (al fondo) filmó diversos momentos de las actuaciones.

En el Bar que se instaló a cargo de seis hijos de socios del Club, se repartieron gratuitamente 300 bocadillos y otros tantos botellines de agua. Se vendieron 250 botellines de cerveza y refrescos (el dia fue bastante frio).

Dos guardas jurados mantuvieron el orden, uno en la llegada y distribución de los vehículos que llegaban al campo (se había habilitado una zona de parking con capacidad para unos 300 vehículos que fue ampliamente desbordada). El otro guarda se encargó de limitar el acceso al recinto cercado para pilotos y pista de vuelo a los aeromodelistas y personal autorizado exclusivamente.

25 vallas metálicas de 3,5 metros de largo por 2 m de alto separaban la zona de boxes y pista de vuelo del público, convirtiéndose en un elemento de seguridad importante para todos. A ambos extremos del vallado metálico se continuó la zona de seguridad otros 150 m con cercado de valla plástica naranja de 1 m de altura, lo que evitaba el acceso de la gente a la zona de vuelo.

Una ambulancia de la Cruz Roja española que, afortunadamente, no tuvo nada de trabajo aportaba seguridad a público y pilotos.

Solamente hubo que lamentar un accidente material. El único motovelero que salió al aire tuvo un desafortunado aterrizaje y se le rompió el ala.

100 personas compartimos mesa y una comida gratuita de hermandad tras el Festival, donde nos hicimos un poco más amigos. Muchos son ya habituales en nuestro Festival.

 Nuestro amigo Jose Antonio Garcia Lorente contempla este estupendo Corsair que procedía de Navarra, ayudando en su puesta en marcha.

El presupuesto de todo el evento superó las 400.000pts y no hubiera sido posible sin la ayuda de entidades como Caja Duero y el Excmo. Ayuntamiento de Soria, sin olvidar otras ayudas "menores" de diversos comercios y organismo de Soria y de las tiendas especializadas "Tu Hobby" de Pamplona y "Todohobbys Aragon" de Zaragoza.

Simultáneamente se realizó una exposición estática en el patio de columnas del Ayuntamiento de Soria donde se colgaron a diversos niveles 9 aviones de algunos miembros de nuestro Club, principalmente maquetas (Spitfire, Mustang, Ryan, Super Stearman, Extra 300, Bellanca Decathlon etc) que fue muy visitada durante los 10 dias que duró.

Las ediciones anteriores del Festival nos han hecho ir mejorando cada año en infraestructura y organización. Tenemos que destacar que en ésta ocasión se ha formado un gran grupo de trabajo que decidimos distribuir en cuatro secciones independientes con un coordinador/director general. La denominada de "Infraestructura campo de vuelo" (5 personas) tuvo a su cargo la instalación del vallado del campo de vuelo y la demarcación del territorio destinado a Parking, colocación de la vistosa manga de viento, pancartas de las firmas colaboradoras, mostradores y refrigeradores del bar e izado de las banderas de la Comunidad De Castilla y León, España y del Ayuntamiento de Soria. La de "Infraestructura externa" (dos personas) se encargó de confeccionar 20 carteles indicadores de 120 x 30 cm con la palabra "aeromodelismo" y una flecha orientadora, que el día anterior se colocaron en todas las posibles rutas de acceso a nuestro Campo de Vuelo, facilitando la llegada a todos los pilotos procedentes de otras provincias, quienes manifestaron no haber tenido ninguna dificultad en localizar la Pista. Otra comisión de 4 personas se encargó del funcionamiento de la mesa de control de frecuencias, con un sistema de diseño propio -que se implantó ya en el año 1995 por TRomo, que se ha mejorado en cada edición con la ayuda de Luis Tomás y Ernesto y que se ha revelado un sistema fabuloso- que hacía realmente difícil la posibilidad de que se produjera un accidente, como se pudo comprobar al verse totalmente desbordados por vuelos no programados, pero que disponían de la pinza de frecuencia que facilitaba la mesa, indispensable para poder volar. Por el sistema de magafonía se recordó en diversas ocasiones la imposibilidad de volar ni siquiera encender la emisora si no se estaba en posesión de la pinza que proporcionaba la mesa de control, cosa que fue aprendida por todos los participantes. Por último otra comisión se encargó del recibimiento, relaciones con pilotos y público y megafonía.

Primer plano de la mesa de control. A la dcha. el sistema de pinzas y debajo emisoras coincidentes en frecuencia custodiadas para evitar accidentes.

En resumen podemos decir que gracias al trabajo de un gran equipo humano y a las colaboraciones recibidas de las instituciones y comercios, se hizo posible éste VI FESTIVAL DE AEROMODELISMO DE SORIA, que ya se ha convertido en algo tradicional dentro de las fiestas de San Saturio patrón de la ciudad de Soria, donde nos damos cita un buen número de amigos aeromodelistas, algunos ya habituales porque acuden desde hace varios años y donde, año tras año, intentamos divertirnos dando un espectáculo muy del gusto del cada vez más numeroso público.